Después que el enviado
especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, se dirigiera a
un grupo de periodistas el viernes 15 de marzo, para hablar sobre los
avances en el conflicto venezolano e intentar sacar partido del ataque
multidimensional que sufrió el sistema eléctrico nacional por varios
días, atribuyéndolo a la corrupción interna del gobierno venezolano y
desinversión en la infraestructura eléctrica del país, diagnosticó: "¿Cuál
es el impacto de esta situación en la longevidad del régimen?
Obviamente va a acortar la vida del régimen (…) No estamos haciendo
ninguna predicción y, al mirar hacia atrás, vemos que, en general, ni
nosotros ni nadie ha sido muy bueno en predecir cuando caen los
regímenes".
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Abrams fue alto funcionario de las Administraciones de Ronald Reagan y George Bush hijo |
Esa incertidumbre sobre cuánto tiempo puede tardar en concretarse el
objetivo golpista que funcionarios como Mike Pence, John Bolton, Elliott
Abrams y el propio presidente Donald Trump, asumieron públicamente y
ante la falta de consenso en la opción militar por parte de los aliados
políticos en la región latinoamericana, le resta firmeza a los intentos
de intimidación política advirtiendo la inminencia de la caída del
chavismo.
Uno de los serios problemas que enfrenta en estos momentos la
Administración Trump es que, a pesar del respaldo que países
subordinados de la comunidad internacional le prestan a la presidencia
artificial de Juan Guaidó, no conducen ningún factor de poder real
dentro de la institucionalidad venezolana.
Cabe destacar que si bien este apoyo es propagandizado, en la
práctica se ve herido cuando los países más hostiles terminan accediendo
a la voluntad del gobierno legítimo de Nicolás Maduro, como lo fuera el
retiro de todos los funcionarios norteamericanos del suelo venezolano
inmediatamente después que el presidente anunciara el plazo de 72 horas
para que la embajada estadounidense abandonara el país.
La razón según Elliott, no viene a acatar la orden de Maduro sino que "es una respuesta pragmática a una situación compleja".
Recuento de los "triunfos" del antichavismo
¿Cuál es el balance que dejan las arremetidas de Washington a
vísperas de cumplirse el primer trimestre del año? El propio Guaidó no
puede ocultar el pobre resultado al evaluar la hoja de ruta seguida y
que ahora debería llevarlo al palacio presidencial.
Explica que las victorias desde la autoproclamación se resumen en el
apoyo "del mundo" a la presidencia interina, refiriéndose al
reconocimiento de 60 países de los 193 que forman parte de la
Organización de las Naciones Unidas.
Venezuela, hemos logrado mucho.— Juan Guaidó (@jguaido) 16 de marzo de 2019
Logramos el reconocimiento del mundo, la protección y rescate de nuestros activos, la coalición y voluntarios por #AyudaHumanitaria y más de 700 funcionarios policiales y militares que se pusieron del lado de la constitución#UnidosYMovilizados pic.twitter.com/jERGhPizje
También el "rescate de nuestros activos" que no es otra cosa que el
robo del dinero venezolano con el consentimiento jurídico de la Asamblea
Nacional en desacato para ser administrado directamente por el
Departamento del Tesoro estadounidense y, entre otras cosas, financiar
las acciones para el cambio de régimen.
Por último menciona el saldo "organizativo" de voluntarios que se
enlistaron en la fallida "ayuda humanitaria" y la defección, siguiendo
cifras manejadas por la Cancillería colombiana de 700 funcionarios
policiales y militares que cruzaron la frontera colombo-venezolana para
acatar el llamado del autonombrado presidente interino de Venezuela y
que actualmente afrontan, junto con los "voluntarios" que también
quedaron de lado de Cúcuta al culminar los enfrentamientos en el puente
Simón Bolívar, el abandono de la dirigencia opositora.
Otra "marcha final" a Miraflores
Juan Guaidó anunció este fin de semana durante un evento político en
el estado Carabobo, sin mencionar fecha, una gira por Venezuela para
conseguir una movilización nacional hacia el Palacio de Miraflores.
Llegó el momento de la organización ciudadana para lograr el cese de la usurpación.— Juan Guaidó (@jguaido) 15 de marzo de 2019
Mañana volvemos a las calles, vamos a retomar los espacios que nos llevaron al #23Ene. Unidos conquistáremos la libertad y la democracia en las calles.#MañanaUnidosyMovilizados pic.twitter.com/9ColBbY7oH
La maniobra viene en el mismo formato del "Día D" que otras veces ha
sido utilizado por el antichavismo bajo otros liderazgos desvanecidos,
para reagruparse luego de los desaciertos en el plan de asedio político
que se inauguró con la autoproclamación presidencial del 10 de enero
fabricada en los Estados Unidos.
Anterior a esto, se quiso tomar ventaja del caos provocado por el
ataque deliberado al Complejo Hidroeléctrico del Guri, alentando la
violencia callejera mediante saqueos a negocios locales y protestas, que
no tuvo el desenlace esperado.
Esta vez, la denominada "Operación Libertad" propone la creación de
comités para alentar las protestas y desobediencia en las calles, según
las propias palabras de Guaidó publicadas en su cuenta de Twitter. En la
estrategia están incluidos los empleados de instituciones públicas, que
son llamados a desconocer al Estado venezolano en una "gran huelga
nacional", apoyando el cambio de régimen.
Además, hace énfasis en seguir convocando a la FANB, institución que
rechazó monolíticamente las pretensiones de fracturar la unidad de sus
componentes.
Una operación que no promete innovaciones en sus métodos de
agresiones, después que el ingreso de "ayuda humanitaria" por las
fronteras de Colombia, Brasil y las fronteras marítimas con Curazao como
la carta fuerte de las medidas políticas estadounidense hacia
Venezuela, en el marco de la propaganda de la "crisis humanitaria" que
también desató el aumento de presiones financieras contra la estatal
petrolera PDVSA y el Banco Central de Venezuela, no concluyera ni
siquiera en el acceso de alguno de los camiones a las fronteras
venezolanas.
No sugiere un crecimiento significativo del respaldo que tienen las
medidas injerencistas en la población, puesto que tampoco propone una
alternativa creativa a las acostumbradas para movilizar seguidores.
Contradicciones en los métodos para abordar a Venezuela
Paralelo a lo que ocurre dentro del territorio nacional, se desarrolla
un encuentro entre Elliott Abrams y el viceministro de Asuntos de
Exteriores de Rusia, Serguéi Riabkov, en Italia. Según señala el
Departamento de Estado de Estados Unidos, el motivo de la reunión es "el
deterioro de la situación en Venezuela".
La reunión se celebra durante los días 18 y 19 de marzo en la ciudad
de Roma y cuenta con la presencia de funcionarios italianos, incluidos
Pietro Benassi, el asesor diplomático del primer ministro de Italia,
Giuseppe Conte. El país es de los Estados miembros de la Unión Europea
que no han fijado una posición sólida en respaldo a la creación de un
gobierno paralelo en Venezuela.
A pesar de la insistencia por borrar Rusia, el vicecanciller Riabkov dejó claro
que ratifica "la inadmisibilidad de la intervención armada en los
asuntos de Venezuela por parte de Washington", a la vez que asegura el
sostenimiento de las relaciones bilaterales en las áreas militar y
energética con la nación venezolana.
De este modo se presentan los desordenados pasos tomados por
Washington con respecto a Venezuela, entendiendo que el gobierno de
transición pierde fuerza mucho antes de capitalizar poder real en el
ejecutivo nacional y las acciones militares no terminan de arrancar por
falta de un evento disparador.
Mientras tanto, pasa el tiempo y quedan expuestas las irregularidades en los falsos argumentos jurídicos
fabricados para legitimar la presidencia interina de Guaidó, haciendo
presa fácil de los medios a la Admistración Trump que sobrelleva su
propio conflicto de poderes a lo interno de Estados Unidos.
Abrams y la crisis de imaginación de EEUU
La repetición mecánica de recursos para forzar la caída del chavismo
evidencia la falta de opciones creativas en el terreno político. Una vez
más, Venezuela afronta otra "marcha final" hacia Miraflores y sabe muy
bien qué esperar: alteración del orden público, provocación a las
fuerzas de seguridad para generar enfrentamientos y deserciones de
algunas figuras del sector público y militar que serán aprovechadas
mediáticamente por el antichavismo.
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ARMAS INCAUTADAS EN CASA DE MARRERO, ASESOR DE GUAIDO |
Una agenda que incluye el financiamiento de células paramilitares que
actuarían en simultaneidad con los movimientos civiles, pero que
también parecen disgregarse tanto por el trabajo de inteligencia hecho
por organismos venezolanos como por la propia falta de organización de
los que comandan esa tarea.
Difícilmente un escenario parecido al de las guarimbas de 2017 pueda
recrearse con la misma efectividad luego de que los métodos utilizados
para impulsarlo y sostenerlo fueron desarticulados. Además, que esta
experiencia le dejó una formación inédita en defensa tanto al componente
militar como al social del chavismo contra la guerra irregular. De allí
que los intentos de volver a ese punto se desarman cada vez más rápido.
No se puede esperar un resultado distinto si se aplica el mismo
formato
Fuente: Misión Verdad
Fuente: Misión Verdad
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