Por: Roberto Malaver
¡Me gusta más el toque de bola que el toque de queda! Así decía el gobernador de Margarita cuando comenzó a ver el toque de queda que se decretó gracias a él por permitir que los scouts de grandes ligas vinieran a ver a los chamos para ver si estaban listos para la gran carpa y los agarró el coronavirus. Es que somos muy arbolarios, como dirían en Margarita, hacemos lo que nos da la gana y por eso no va como nos va. Ahora Gómez y Maneiro están en toque de queda, qué les diría Simón Bolívar de verlos en ese estado. En el municipio Maneiro fue el alcalde Morelista, más no moralista, que se contagió, y en el municipio Gómez fue el gobernador que permitió esa jugada, pero ahora, como siempre, que yo no fui, que yo no estaba ahí, que eso no depende de mí, que todo pescado tiene espina y tajalí carga la fama.
¡Me gusta más el toque de bola que el toque de queda! Así decía el gobernador de Margarita cuando comenzó a ver el toque de queda que se decretó gracias a él por permitir que los scouts de grandes ligas vinieran a ver a los chamos para ver si estaban listos para la gran carpa y los agarró el coronavirus. Es que somos muy arbolarios, como dirían en Margarita, hacemos lo que nos da la gana y por eso no va como nos va. Ahora Gómez y Maneiro están en toque de queda, qué les diría Simón Bolívar de verlos en ese estado. En el municipio Maneiro fue el alcalde Morelista, más no moralista, que se contagió, y en el municipio Gómez fue el gobernador que permitió esa jugada, pero ahora, como siempre, que yo no fui, que yo no estaba ahí, que eso no depende de mí, que todo pescado tiene espina y tajalí carga la fama.